Si desconectar en vacaciones a veces es algo complicado, sobre todo si llevamos ritmos de trabajo elevados, la vuelta a la rutina vuelve a suponer un reto tras esas merecidas vacaciones.
Pero que no cunda el pánico. Desde el Máster Universitario en Gestión de Recursos Humanos, Trabajo y Organizaciones (MARTHO) te vamos a proponer algunas estrategias para que el retorno a la rutina sea menos duro.
Aunque la idea de planificar suene un poco aburrida, sobre todo si todavía estás de vacaciones, aprovechar los días de descanso para tomar perspectiva de los meses venideros pueden ayudarte a gestionar mejor tus objetivos personales como profesionales.
Pequeños cambios para darte otro ritmo a tu día a día
Para romper la rutina del día a día puedes hacer pequeños cambios en tu casa que te ayuden a refrescar el ambiente y sentir que hay algo diferente. Cambiar los cuadros o fotos de sitio, colgar las fotos de tu último viaje, introducir nuevas plantas o reorganizar tus armarios, pueden introducir una sensación de novedad que hagan más llevadera la vuelta de las vacaciones. Incluso puedes aprovechar los últimos días de vacaciones para planificar este tipo de tareas y reponer fuerzas de las aventuras veraniegas.
Apps y tecnología para ayudarte a optimizar tu tiempo
Y sí, también debes pensar por lo menos un ratito en la vuelta al trabajo y cómo llevar mejor la vuelta a la rutina. Actualmente cuentas con numerosas aplicaciones que pueden ayudarte a planificar mejor tu tiempo y a organizar tus objetivos, como pueden ser: Evernote, Google Calendar, OneNote, Keep… Explorar sus posibilidades y aprender a utilizarlas en vacaciones puede ayudarte a automatizar procesos que te ayuden a liberar tiempo.
Pero no solo la tecnología puede ayudarte en el trabajo, también lo pueden hacer en casa. ¿Sacas partido a los asistentes como Google, Siri, Alexa…? ¿Has incorporado un robot aspirador a tu vida? Igual que llegó la lavadora y el lavavajillas, los robots aspiradora que ya hasta friegan, pueden ayudarte a liberar tu mente de esa tarea y dejar tiempo para otras cosas.
Piensa en ti y en tus necesidades
Dejar tiempo para cuidar de ti, darte algún pequeño capricho o apostar por un estilo de vida saludable pueden ayudarte a mejorar tu estado de ánimo y que la rutina se haga más llevadera. Al final la felicidad es un estado de ánimo momentáneo que va y viene alternándose con momentos emocionales de mayor y menor energía. Escuchar a tu cuerpo, descansar cuando lo pida y dormir las horas que necesitas también contribuirán a mejorar tu estado de ánimo.
Foto por Yeshi Kangrang / Unsplash
